miércoles, 9 de abril de 2014

“La Devoción Mariana es una Experiencia Cristiana”

Tomado de la charla realizada en Célula de Parroquia Santa Rita de Cascia - 

Los numerales (#) están tomados del Tratado de la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen María -San Luis María Grignión de Monfort
1.       
#14 -  #15
Dios no necesita a María para su designio porque Él es El que Es (Ex 3, 14) sin embargo le basta con “querer hacerlo”. Y por siempre seguirá siendo igual.

#32
Ninguna madre da a luz la cabeza sin los miembros, ni los miembros sin la cabeza; de lo contrario aquello sería un monstruo de la naturaleza. Del modo, en el orden de la gracia, la Cabeza y los miembros nacen de la misma madre. Y si un miembro del Cuerpo místico de Jesucristo, es decir, un predestinado, naciese de una madre que no sea María, la que engendró a la Cabeza, no sería un predestinado ni miembro.


2.       
#61
Primera verdad:

#68
Segunda verdad:

#77
Si alguno no quiere que nos llamemos esclavos de la Santísima Virgen, ¿qué más da? ¡Hacerte y llamarte esclavo de Jesucristo es hacerte y proclamarte esclavo de la Santísima Virgen! Porque Jesucristo es el fruto y gloria de María.

La verdadera devoción es:
1.  I
2.  
3.  
4.  
5.  

3.       
#120
a.  
b.  N
c.   

No hay quien haya estado más semejante, unida y consagrada a Jesucristo que: María.

4.      
1.  
2.  
3.  

5.        
#213 - #225
1.  
2.  
3.  



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IMPORTANTE: NUESTRA COMUNICACIÓN CON MARÍA DEBE SER VERBAL
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"La acción que María realiza en el plan de la salvación es siempre Cristocéntrica, es decir, hace directamente referencia a una mediación que se lleva a cabo en Cristo”
JUAN PABLO II.


Tomado de la charla realizada en Célula de Parroquia Santa Rita de Cascia
Sabanagrande (Atlántico)
CONI.
Catequista WEB
alexgomez0108@hotmail.com
Artículo revisado por:
Edward Utria Londoño Pbtro.

El Santo Rosario: Mar de bendiciones


Rezar el Santo Rosario: Robustece la Fe Trinitaria.

Es decir, nos guía a nuestro Padre
nos muestra a su Hijo como verdadero hombre y verdadero Dios
 y nos sacia de la presencia de su Espíritu Santo
De esta manera, el Santo Rosario ensalza y aviva en nosotros el dogma de

María, Madre de Dios.


“Es un camino de asimilación del misterio divino de una forma cristianamente contemplativa”.
Encíclica Rosarium Virginis Mariae, Beato Juan Pablo II,

Disposición para rezar el Santo Rosario:
1° Quien reza el Rosario debe hallarse en estado de gracia o al menos, resuelto a salir del pecado. Efectivamente, la teología nos enseña que las buenas obras y plegarias rezadas en pecado mortal son obras muertas, que no logran agradar a Dios ni merecer la vida eterna. en este sentido dice la Escritura: No corresponde a los pecadores alabar (Eclo 15,9)

2° He dicho "o estar al menos resuelto a salir del pecado":
Porque si fuera necesario estar en gracia de Dios para orar en forma que le agrade, la consecuencia sería que quienes estén en pecado mortal no deberían orar - no obstante tener más necesidad de ello que los justos - y por consiguiente, no debería aconsejarse a un pecador que rece el Rosario o parte del mismo, porque le sería inútil. Lo cual es un error condenado por la Iglesia.

       De tal manera, aconsejo el Rosario a todo el mundo, a fin de que perseveren y crezcan en gracia de Dios; a los pecadores, para que salgan de sus pecados. Qué pecado sería a convertir el manto protector de la santísima Virgen María en manto de condenación para ocultar crímenes y cambiar el Rosario - que es remedio de todos los males - en veneno mortal y funesto, y lo que es peor que muchas veces se hace por la simple ignorancia o el mal manejo de la espiritualidad mariana.

De San Luis María Grignion de Monfort: "
La Virgen María mostro un día hermosos frutos, en una bandeja llena de inmundicias, a un impúdico que recitaba constantemente el Rosario todos los días. Él se quedó horrorizado. La Virgen le explico:"¡Tú me sirves así!¡Me presentas hermosas rosas en un vaso sucio y contaminado!¡Juzga tú mismo si me agradaran!"

Tomado de la charla realizada en la Parroquia Divino Niño Jesús
Soledad (Atlántico)
CONI.
Catequista WEB
alexgomez0108@hotmail.com
Artículo revisado por:
Edward Utria Londoño Pbtro.

jueves, 7 de noviembre de 2013

ABUNDANTE TESTIMONIO

 En medio de mi experiencia pastoral he visto, escuchado e imaginado toda clase de sacerdotes, desde los más osados, carismáticos, divertidos y abiertos, hasta los más serios, serenos, precavidos y orantes, sin duda todos centrados en la entrega desinteresada y amor profundo por el Cuerpo y la Sangre de Cristo.

Los sacerdotes son abundantes testimonios de vida, por tanto la coherencia con su vocación debería ser consecuente, y la homilía una respuesta congruente a su servicio, como realmente es si la vocación nació del corazón. Su testimonio se ve en la pulcritud del cleriman y el alba, que viven con dedicación. Son ellos testigos de nuestro caminar y, como Jesús en Emaús, cuando nos desmotivamos son ellos los que nos revelan la gloria Divina en la Eucaristía. Es la plenitud que los sacerdotes viven en Jesús lo que nos muestra su santificación, su pasión, su abundante testimonio.

Por otro lado, nosotros no sabemos a ciencia cierta dónde termina la humanidad de Jesús y dónde comienza su Divinidad, igualmente el testimonio de los sacerdotes nos muestra el mismo misterio, pues, no sabemos dónde termina el hombre, ni dónde comienza el santo, eso lo transmite su rostro.

Finalmente, me gustaría decir que, nuestro amor mariano crece cuando el sacerdote refleja su filial Magnificat, cuando su entrega trasluce el fiat humilde de nuestra Madre y su presencia hace saltar nuestro espíritu, como en Isabel. Por tal motivo, es de nosotros la responsabilidad de orar por ellos, por las vocaciones, tanto masculinas como femeninas, apoyarlos en la construcción de comunidad, en fin, acompañarlos en su camino a la santidad.


A ustedes queridos sacerdotes porque tienen abundante testimonio.






CONI.
Catequista WEB
alexgomez0108@hotmail.com
Artículo revisado por:
Lila Patricia Sarmiento Ortega
Lic. Humanidades y lengua Castellana.

miércoles, 21 de agosto de 2013

ADORACION DE IMÁGENES I


Un diseñador leyendo la Biblia se encontró la siguiente cita: “No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra”. Quedó consternado porque se sentía el más pecador de los pecadores, puesto que su labor era “crear imágenes” (eso hacen los diseñadores). Todo el día estuvo pidiendo perdón a Dios por sus pecados y había decidido cambiar de profesión ¿pero a cual dedicarse? Entrada la noche, de nuevo tomó la Biblia y leyó otra vez el pasaje, pero esta vez leyó todo el capítulo, para entender mejor lo leído. Oh sorpresa cuando leyó el versículo anterior, y aún más sorprendido cuando leyó el siguiente y los subsiguientes, le dio gracias a Dios por haberle hablado.

Ponte en la misma tarea, no leas solo el versículo cuatro, porque de este modo nadie sería salvo, pues la vida está hecha y basada en imágenes, lee los anteriores y los posteriores, te darás cuenta de la verdadera razón de tal versículo. Si fuera de este modo, la misma Biblia se contradijera cuando Dios mismo manda a crear el Arca de la alianza, donde tendría su “lugar del perdón”, la cual manda a construir con dos “querubines de oro” (los querubines son ángeles de Dios y están “arriba en el cielo” con El), es más no sólo leas el capítulo veinte (20), lee también el veintiuno (21), veintidós (22) y los demás, es más lee toda la Biblia, así entenderás mejor la Palabra de Dios.

De este modo, no se preocupen diseñadores, escultores o arquitectos, o simplemente cualquiera, siempre que toda imagen no sea para “adorar dioses ajenos” (que es lo que tácitamente nos prohíbe el Señor) no están cometiendo ningún pecado, sigamos diseñando sin temor alguno hermanitos, pero que no se les olvide, solo uno es nuestro Dios y solo a El debemos adorar.



CONI.
Catequista WEB
Alexgomez0108@hotmail.com

lunes, 3 de junio de 2013

Llamado a ser Apóstol


A ustedes queridos catequistas.

El Señor Todopoderoso siga derramando sobre ustedes el amor de su Espíritu Santo y, de esta forma, continúe infundiéndoles el don de la Palabra y la enseñanza kerigmática.

Por siglos el canon bíblico infundido por Dios nos ha inspirado igualmente un depósito de fe, éste nos ha enseñado con amor, el amor de Jesucristo, del mismo modo ha hecho que lo doctrinal se resuma en dos letras: fe y de nuevo se expanda a lo que debe ser la base cristiana: la Trinidad. La tradición junto con la Ley y los escritos nos llama, nos acepta y nos renueva, nos propone una compañía eterna, una salvación inevitable a la que no podemos escapar, a pesar de nuestros esfuerzos de ignorarla, sigue triunfando y aumentando la fe de los que han encontrado en ella, la Palabra, en síntesis: la felicidad.

Como catequistas siento que somos guardianes de la alianza, y es deber cristiano: degustarla y digerirla, salir al mundo y ser el gran cristiano que Jesús creó con su entrega Divina dándola a todos, es nuestro deber hacernos Pablo, creernos discípulos, imaginarnos santos, ser hijos de María, sin importar la hora, el tiempo, ni la distancia por recorrer, es decir, nuestro deber es aumentar nuestra fe.

Yo, amigo de Jesús, dicho por sus propias palabras, pretendo ser santo, sin embargo me acoge la ambición, como catequista me arropa la ambición de construir mi santidad. Cuán difícil sea, mi ambición es ganarme el Reino de los cielos completico.


Catequista que lees, el depósito de nuestra fe vuelve a llamarte y si en algún momento sientes deseo de gritar: “si es posible aparta de mi esta misión”, con fortaleza grita más fuerte: “Señor, haz en mí tu voluntad y aumenta mi fe” y cree que Dios te ha hecho el mejor de sus catequistas, tal cual como lo demuestras en tu compromiso con la parroquia.



Que la gracia Divina acoja tu sólida respuesta, tal cual como el Fiat mariano, y la Santísima Trinidad haga su voluntad en ti.


CONI.
Catequista WEB
Alexgomez0108@hotmail.com
Artíulo revisado por:
Pbtro Edward Utria Londoño

Pablo, modelo de catequista

A ustedes queridos catequistas.

El Señor Todopoderoso siga derramando sobre ustedes el amor de su Espíritu Santo y, de esta forma, continúe infundiéndoles el don de la Palabra y la enseñanza kerigmática.

Del mismo modo que Pablo abrazo la fe de Jesucristo en el mismo momento de su conversión, fortaleciendo su cuerpo y alma (Hch 9,19-20) así mismo nosotros amigos catequistas hemos sido enviados (Mt. 28, 18-20) a llevar la alegría de Dios manifestada por medio de Cristo (Lc 2, 10).

Nuestro valor no lo obtenemos de las tantas catequesis que hemos podido desarrollar, ni la forma, ni la intensidad, sino de nuestra manera de asimilar nuestro llamado, como Pablo (Hch. 9, 22).

Como humanos tendremos debilidades y fortalezas, sin embargo somos parte del cuerpo de Cristo (1ª Cor. 12, 27) y como tal debemos hacer que nuestras debilidades se vuelvan fortalezas y nuestras fortalezas sean apoyo para las debilidades del prójimo. Por consiguiente, hacer que Jesús sea nuestro estilo de vida, es acariciar en todo momento la gracia del perdón (Heb. 4, 14-16) y la alegría del servir (Mt. 20, 28).

La invitación que hoy les hago es a no desfallecer, aun cuando los afanes del mundo nos hagan cautivos, recordemos que Pablo se dejó inundar del Espíritu Santo y aún cautivo, su misión lo mantuvo libre.

Con gracia y alegría comparto esta experiencia kerigmática con ustedes mis hermanos en Cristo nuestro Señor.





CONI
Catequista Web
alexgomez0108@hotmail.com

Artículo revisado por: Lila Sarmiento - Lic. Humanidades y Lengua Castellana (UA)

lunes, 9 de enero de 2012

SOLO DIOS BASTA

Santa Teresa de Jesús.

El católico vive en un mundo de ocasiones y andanzas, de música y enseñanzas, donde aprende de la mano de Jesús que: “solo Dios basta”. Sin embargo, muchos tergiversan tal expresión, entendiendo que arriba no se tiene hermanos, ni mamá, ni parientes que nos ayuden a seguir adelante. Esto significa que no somos huérfanos de Madre queridos católicos, ni olvidamos a esos hermanos de los que nos sentimos orgullosos, y a los cuales nos gustaría tomar como ejemplo de vida en complemento al ejemplo de vida de Jesús. Tenemos un Padre que adoramos y una Madre que respetamos y veneramos, así como lo hacemos con muchos otros hermanos a los que designamos como Santos. Así, a pesar de tener una familia completa en el cielo, sabemos y entendemos que: “Solo Dios basta”, eso lo entiende un católico fiel.

Santa Teresa de Jesús nos regala un lindo poema llamado "Nada te turbe" que, además de ser sublime, es tan bello como cada letra que lo compone. Ella nos enseña el valor de tener a Dios como nuestro Único Dios, que nos baste solo su amor para seguir adelante. Nada te turbe, dice Santa Teresa de Jesús, porque al final solo Dios basta.

Quise crear una catequesis sobre esta fuerte y delicada frase, sin saber a ciencia cierta su procedencia, e investigando me tope con la “patrona de los escritores católicos”. Desconocía este lindo título que la Iglesia le había otorgado a Santa Teresa de Jesús. Dios me hizo tropezar con esta gran mujer, así que decidí leer más acerca su obra, por lo cual hermanos pronto escribiré sobre ella.


CONI.
Catequista WEB
Alexgomez0108@hotmail.com
Artíulo revisado por:
Lila Sarmiento - Lic. en Humanidades y lengua castellana
Dagoberto Gómez Ariza - Múdico Veterinario (mi padre)